La empresa petrolera Shell no hará transitar sus navíos por el mar Rojo hasta nueva orden, según informaciones publicadas el martes por The Wall Street Journal (WSJ), en un contexto de amenazas de los rebeldes yemenitas hutíes al transporte en esa región.

Según el diario, el grupo tomó su decisión la semana pasada, debido al riesgo para sus tripulaciones y el peligro de una marea negra en la región en caso de ataques.

Consultado por la AFP, un portavoz de Shell rechazó comentar el informe.

El martes, un navío griego fue alcanzado por un misil disparado por el grupo yemenita cuando se dirigía al canal de Suez.

Unos 30 navíos fueron objeto de disparos o ataques de parte de los hutíes desde fines de noviembre.

Los rebeldes yemenitas, apoyados por Irán, multiplicaron en las últimas semanas los ataques en el mar Rojo contra navíos que sospechan vinculados a Israel. Los hutíes afirman que actúan en solidaridad con los palestinos de Gaza, en medio de la guerra entre Hamás e Israel.

Los ataques en el mar Rojo, por donde transita 12 por ciento del comercio mundial, llevaron a Estados Unidos y el Reino Unido a atacar el viernes y el sábado a los rebeldes en Yemen, que replicaron el lunes con un disparo de misil en contra de un carguero estadounidense, sin dejar heridos ni daños mayores.

Los ataques de lo hutíes llevaron a muchas navieras a evitar la zona, lo cual genera sobrecostos y plazos más largos para los fletes.

Entre las compañías petroleras, BP y  QatarEnergy ya anunciaron que evitarán el mar Rojo, al igual que el gigante danés del transporte marítimo Maersk.