La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, expresó que «espera que no haya afectaciones» a las remesas enviadas desde Estados Unidos, el principal ingreso de divisas en el país, ante las deportaciones masivas que promete el próximo gobernante estadounidense, Donald Trump.

De esta forma, reiteró en su conferencia matutina que buscará una reunión con el equipo de transición de Trump antes de que el republicano tome posesión, el próximo 20 de enero.

«Esperemos que no haya afectación (a las remesas), y nos estamos preparando para poder tener estas reuniones previas y también trabajando en lo que tiene que ver con la relación económica, migración, seguridad y otros temas de alto nivel que tenemos que ver, si se puede, en una reunión, antes de que llegue el presidente Trump» (a la Casa Blanca), declaró.

En el país preocupan las promesas de deportaciones masivas desde Estados Unidos, donde los mexicanos son cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados y sus remesas representan casi el 4% del producto interno bruto (PIB) de México, que este año tendría un récord estimado de 65 mil millones de dólares.

México es el segundo mayor receptor de remesas en el mundo, solo después de India, según el Banco Mundial.

TEMOR AL «ZAR DE LA FRONTERA»

La inquietud crece después de que en Estados Unidos trascendió el próximo nombramiento del próximo «zar de la frontera», Tom Homan, quien fue director del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en la primera presidencia del republicano (2017-2021), cuando instauró la política de separación de familias migrantes.

Además, Trump nombró como subdirector de política de la Casa Blanca a Stephen Miller, conocido como el arquitecto de la estrategia de deportaciones masivas.

“Decirles a nuestros hermanos y hermanas en Estados Unidos que siempre los vamos a defender, que se acerquen a los consulados», manifestó Sheinbaum.

Ante las advertencias de Trump, quien priorizó en campaña el control de la migración en la frontera con México, el gobierno de Sheinbaum Pardo defiende que su estrategia «humanitaria» heredada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), ha disminuido en 76 % desde diciembre el flujo en el límite común.

«Estamos trabajando nosotros también para que en su momento, si es posible, pueda haber una reunión con el gabinete de transición del presidente Trump y las autoridades mexicanas para avanzar previamente en la coordinación», remarcó la presidenta.