Desde Tamaulipas, Ricardo Monreal, aspirante a la Coordinación de los Comités de la Defensa de la Transformación, afirmó que, de ocupar ese cargo en Morena, no permitirá que Estados Unidos use a las y los migrantes como instrumento político, económico o electoral.

Además, adelantó que no permitirá que el gobierno norteamericano tenga mayor respeto para “los hermanos migrantes”, pues todos tienen derecho a una vida digna y a contar con “una vecindad duradera”.

En una asamblea informativa en Reynosa, Tamaulipas, Monreal subrayó que exigirá una solución integral para atender los problemas del fenómeno migratorio, pues consideró “muy importante” que todas las personas migrantes y quienes viven en la zona fronteriza vivan con dignidad.

Recordó que “cada 12 años, las elecciones de Estados Unidos y de México para elegir Presidentes se empatan y siempre somos usados como piñata electorera de los gobernadores de Estados Unidos y de los candidatos a la Presidencia”,

Por ello, reiteró que trabajará para que la ciudadanía pueda tener una vida digna y libre de temor. Vamos a luchar, dijo, porque este país crezca, se fortalezca y sea más próspero.

Monreal destacó que, gracias al trabajo desde el Senado de la República, donde se fue coordinador de Morena, se logró modificar la Constitución para que nadie pueda quitar el derecho a los programas sociales, un compromiso de campaña del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Entre otros avances de la Cuarta Transformación, recordó que se derogaron “la mal llamada reforma educativa” y con el acompañamiento de maestras y maestros, se diseñó una nueva ley, que beneficia a los trabajadores de la educación.

Sin embargo, Ricardo Monreal afirmó que falta mucho por hacer para consolidar el proceso de transformación que vive México, por ello, quiere dar continuidad al proyecto que inicio Andrés Manuel López Obrador.

Por ello, el aspirante a la Defensina de la Transformación reiteró que trabajará para recuperar la seguridad, la paz y la tranquilidad en todo el territorio nacional, pues nadie tiene el derecho de arrebatarnos la tranquilidad.