El presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a la Fiscalía General de la República (FGR) a que informe sobre las denuncias de espionaje a periodistas, defensores de derechos humanos y opositores a través del programa de espionaje “Pegasus” en el sexenio pasado, pero también del suyo, porque “hay que ir al fondo”.

En su conferencia matutina, López Obrador volvió a señalar que en sexenios pasados había funcionarios públicos “que no servidores públicos” que se dedicaban al espionaje y vendía equipos al gobierno federal, pues aseguró que esto era un “negocio jugoso” y muy lucrativo.

“No tengo mucha información, solo que existen estas denuncias en la Fiscalía y para no especular, lo mejor sería pedir a la FGR de manera respetuosa que nos informe sobre estas investigaciones, todo lo relacionado con la adquisición de equipos de espionaje y su uso, incluidas las denuncias recientes, porque también se afirmó de que nosotros espiábamos a opositores, a dos periodistas, pues que todo se investigue y se aclare.

“Lo que es un hecho, una realidad, pero se necesita probar es que en los gobiernos anteriores era una práctica común espiar a los opositores, a periodistas, y que estos equipos de espionaje los compraban gobiernos estatales, desde luego el gobierno federal, pero también agrupaciones políticas y organizaciones supuestamente de la sociedad civil. Estás haciendo mención de cuando se echó a andar, entre otros planes, para espiarnos el `Pejeleak´ y hay mucha información sobre esto, pero que sea la Fiscalía la que informe. Es un buen tema, y hay que ir al fondo, yo croe que ya tienen bastante”, sostuvo.

López Obrador sostuvo que el espionaje era además un jugoso negocio porque a México venían empresas del exterior de algunos países especializados en el espionaje que no la inteligencia y se dedicaban a vender estos equipos y se llevaban muchas utilidades.

“Había funcionarios públicos -que no servidores públicos -que incluso terminaban su función si se dedicaban a esto, al espionaje, a vender equipos. Creo que el señor García Luna también estaba metido en una empresa que prestaba servido de seguridad ay que ambienten tenia equipos y vínculos con empresas del extranjero. Era un negocio muy lucrativo, entonces por eso sí convendría que se supiera todo, pensando siempre en la no repetición, en que estas cosas vergonzosas no vuelvan a suceder en nuestro país, que no se va como una asunto normal”, señaló.