La Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés) incrementó esté miércoles su tasa de interés de referencia a 25 puntos base, además de señalar que está a punto de frenar nuevas alzas en los costos de endeudamiento por la caída de tres bancos en menos de una semana.

La Fed anticipa además una inflación algo más elevada de lo esperado en diciembre, de 3.6% en 2023 frente a 3.5% inicialmente previsto, y un crecimiento del PIB algo menor, de 0.4% frente a 0.5%.

Asimismo, se espera que la FED lleve su tasa hasta un 5.1 por ciento al finalizar el año, además de un posible ajuste adicional en los próximos meses.

El rango, que oscila entre el 4.75 al 5 por ciento, es un incremento que no se había registrado desde hace 17 años, considerándolo como el más agresivo en la última década.
A pesar de las caídas de tres bancos en las últimas semanas, el Banco Central no detuvo las alzas en sus ciclos, por lo que el actual objetivo es regresar la inflación a un 2 por ciento del 6 que presentó en el mes pasado.

La Fed sostuvo que los problemas del sector bancario “probablemente resulten en condiciones de crédito más ajustadas para hogares y empresas, y podrían pesar sobre la actividad económica, el empleo y la inflación”.