Una delegación estadounidense de alto nivel viajará a México en los próximos días para hablar de la crisis migratoria, informó la Casa Blanca el jueves tras conversaciones telefónicas entre los presidentes Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador.

Biden pidió al secretario de Estado Antony Blinken, al secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas y a la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Liz Sherwood Randall, que viajen a México “en los próximos días”.

Los tres funcionarios estadounidenses “se reunirán con el presidente López Obrador y su equipo para discutir nuevas acciones que se pueden tomar juntos para abordar los desafíos fronterizos actuales”, apuntó Kirby.

Las conversaciones y el viaje se producen mientras el opositor Partido Republicano presiona a los demócratas de Biden para que realicen cambios importantes en la política de inmigración como condición para aprobar un paquete de asistencia de emergencia para Ucrania e Israel.

Kirby dijo que ha habido un “aumento dramático” en la migración a través de la frontera, en gran parte desde países centroamericanos devastados por la violencia.

En su conversación telefónica del jueves, Biden y López Obrador “compartieron una preocupación similar sobre el aumento del flujo migratorio en las últimas semanas”, indicó Kirby.

Ambos mandatarios hablaron “en términos generales sobre lo que se puede hacer dentro de México para frenar ese proceso”, dijo.

Algunas de las medidas posibles serían aumentar los puestos de control en líneas ferroviarias y carreteras y ampliar la presencia de fuerzas de seguridad en la frontera sur de México, señaló el vocero.