El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que su administración se encuentra “prácticamente al día” en cuanto a deudas con proveedores, gracias a una gestión financiera “responsable y transparente“.

Durante su conferencia de prensa matutina de este miércoles, el presidente destacó que la efectiva recaudación fiscal, libre de privilegios fiscales y condonaciones, ha sido clave en este logro.

“Estamos prácticamente al día, no tenemos deudas con proveedores”, afirmó el mandatario, reconociendo la cooperación de los grandes contribuyentes en cumplir con sus obligaciones fiscales.

Según López Obrador, la recaudación ha sido sólida debido a la eliminación de exenciones fiscales indebidas y a la confianza renovada de los contribuyentes en el gobierno, convencidos de que sus impuestos ya no serán malversados.

Hasta el 28 de noviembre, los ingresos tributarios alcanzaron los 4 billones 38 mil 294 millones de pesos, un 10.6 por ciento más en términos reales comparado con el mismo periodo del año anterior.

El total de ingresos de enero a noviembre de 2023 ascendió a 4 billones 671 mil 673 millones de pesos, un 2 por ciento más que en 2022.

El presidente también resaltó que, aunque no ha habido un incremento en los impuestos, sí ha habido un aumento significativo en la recaudación, atribuyéndolo a una mayor confianza en el manejo gubernamental de los recursos.

“Ahora se está apretando el cinturón el Gobierno, no el pueblo. Esa es la austeridad republicana“, expresó.

Finalmente López Obrador recordó prácticas corruptas de administraciones anteriores, como los “moches” en la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación y acusó al gobierno de Enrique Peña Nieto, específicamente al exsecretario de Hacienda Luis Videgaray y al exdirector de Pemex Emilio Lozoya, de entregar sobornos a legisladores del PAN para aprobar la Reforma Energética.

“Todo eso debe desaparecer, porque eso era lo que imperaba”, sentenció el presidente.