México expuso este lunes los argumentos con los que busca que una corte de apelaciones estadounidense acepte su demanda contra grandes fabricantes de armas de ese país, a los que considera en parte responsables de la violencia criminal en su territorio, informó la Cancillería.

La demanda acusa a las firmas estadounidenses de realizar un comercio “negligente e ilícito” que alienta el narcotráfico y la violencia en México. Se presentó originalmente ante una corte federal de Boston (estado de Massachusetts) en agosto de 2021, pero fue desestimada en septiembre pasado.

“El mejor escenario es que la corte de apelaciones decida que el juez de primera instancia (…) erró en su análisis jurídico y le ordene que el litigio continúe”, explicó Alejandro Celorio, consultor jurídico de la Cancillería en una videoconferencia desde Boston.

El alegato de México se sostiene en tres argumentos principales, explicó Celorio. El primero es insistir en que una ley que ofrece ciertas inmunidades a la industria de armas estadounidenses no aplica para daños ocurridos en México.

El segundo se refiere a resolver el “conflicto de leyes” entre las normas mexicanas y las estadounidenses para estos casos, mientras que el tercero se centra en el derecho de México a “recurrir a ciertas excepciones” en la aplicación de la ley de inmunidad del país vecino.

Celorio añadió que la corte de apelaciones puede tomar hasta ocho meses en analizar los argumentos.

En septiembre, el juez Dennis Saylor desechó el reclamo mexicano alegando que sus demandas están prohibidas por la ley federal estadounidense.

México reclama una compensación de unos 10 mil millones de dólares a las firmas Smith & Wesson, Beretta, Colt, Glock, Century Arms, Ruger y Barrett e Interstate Arms.

Además de la querella contra las fabricantes, México presentó en octubre pasado una segunda demanda en una corte de Tucson, Arizona, en contra de cinco empresas de venta de armas, cuya primera audiencia tendrá lugar “a finales de agosto“, informó Celorio.

Según datos del gobierno mexicano, un 80 por ciento de las armas que utilizan las bandas criminales provienen de Estados Unidos. El país registra más de 350 mil homicidios dolosos desde 2006, la mayoría atribuidos al crimen organizado.