El pleno de la Cámara de Diputados avaló este jueves el prohibir la adición de grasas trans a los alimentos y las bebidas no alcohólicas durante su proceso de elaboración industrial.

Con 472 votos a favor, los legisladores avalaron la reforma a la Ley General de Salud y fue remitida al Ejecutivo para su publicación en el Diario Oficial de la Federación y entrada en vigor.

El diputado Joaquín Zebadúa recordó que el consumo de grasas trans provoca la muerte de 500 mil personas cada año en el mundo, de las cuales 13 mil corresponden a México.

Durante la fundamentación del dictamen de la Comisión de Salud, el legislador dijo que la iniciativa busca salvar vidas.

El legislador de Morena remarcó que las grasas trans ocasionan enfermedades del corazón y muertes por accidentes cardiovasculares, coloquialmente conocidos como “derrames”.

“Si se sabe desde hace tiempo que estas grasas trans adicionadas a los alimentos son tan nocivas y causan muertes, cardiopatías y accidentes cardiovasculares, ¿por qué se siguen utilizando?, pues porque son más baratas para la elaboración de los alimentos y dan más tiempo de vida en los anaqueles”, acusó.

Derivado de las metas establecidas por la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud, la adición de un artículo 216 bis a la Ley General de Salud prohíbe añadir aceites parcialmente hidrogenados a los alimentos procesados, así como disminuir a un máximo de dos gramos por cada 100 las grasas trans.

Tras conocerse la aprobación de la iniciativa, Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, celebró la decisión e indicó que esta medida, junto con el etiquetado frontal, reducirá la prevalencia y mortalidad cardiovascular y metabólica, “ya que la mayoría de las grasas trans que consumen las personas mexicanas provienen de productos chatarra”.