Por Ivette Estrada

Los obstáculos que le impiden a una mujer ascender en su profesión se representan como un laberinto gracias a Alice Eagly de la Universidad de Northwestern y su colega Linda Carli del Wellesley College. Ellas sugirieron esta figura en lugar del “techo de cristal” por ser más fidedignas las encrucijadas que las ejecutivas enfrentan cada día.

Empero, aún no existe una llave para cruzar las barreras organizacionales, pero Ivonne Palacios, Head Legal Management Group Contenciosos de BBVA que tiene a su cargo 240 abogados en el país, comparte siete principios para salir del laberinto de cristal.

  1. Hacer lo que te apasiona. Tu trabajo debe ser lo suficiente motivante para imponerte retos y superación continua. En lo personal, siempre supe que sería Abogada porque no tolero las injusticias. Cada uno poseemos intereses que logran definirlos y por los que apostamos nuestras habilidades y conocimientos.
  2. Tener muy claro que el límite eres tú. Así, conviene visualizar el éxito, no dejar de soñar y alejarse de personas tóxicas que expresan de manera directa o velada que no puedes lograr lo que te propones. Las tres herramientas con las que se debe contar siempre son trabajo, esfuerzo y fe. El cumplimento de objetivos se construye, no es algo fortuito o heredado. No es suerte. Es trabajo duro y consistente.
  3. En la medida que aceptamos que todo tiene una razón tomamos menos acciones viscerales que suelen ser contraproducentes en la vida personal y profesional.
  4. Forma es fondo…y a la inversa. Deben cuidarse las formas. Aunque se sea muy directa, existen maneras más elegantes de expresar un no, por ejemplo. Se requiere modular el comportamiento. Manera de expresarnos, apariencia y lenguaje no verbal tienen una importancia crucial. Asimismo, la comunicación resulta crucial, así como el saber hablar en público. El poder de la palabra es muy importante.
  5. Poner límites. Es importante saber decir no. Y lograrlo implica valorarse a una misma. Esto no tiene que implicar agresividad, pero si firmeza. Incluso los mensajes más crudos se pueden matizar con diplomacia. Por supuesto, se trata de una tarea de rencontrase a si misma, abrazar la niña interior y trabajar por la autoconfianza, pues nos convierte en personas más estrategas.
  6. Esa es la clave del networking que debemos ejercer cada día, cada minuto. La generación de redes sociales nos permite ser más inclusivos y lograr mejo trabajo en equipo. Para una característica muy valorada en el actual liderazgo, el factor esencial es construir a través de la genuinidad.
  7. No es religión. Es la consciencia de tener un ser superior en tu vida que te guía y cuida. Es lo que evita perdernos en el materialismo.

La Abogada egresada de la Escuela Libre de Derecho, con una Maestría en Derecho Penal y un Doctorado en Derechos Humanos, inició su carrera en el banco en 1999, asumió la función hipotecaria en 2003 y desde el 2019 lleva toda el área contenciosa de BBVA.

Madre de un chico de 18 años, tiene contemplado en un futuro dar clases.