En América Latina, hablar y escribir en inglés, se ha vuelto determinante para obtener un nuevo puesto en compañías de la región y luego de la pandemia, la demanda por aprender un segundo idioma ha crecido de forma vertiginosa, destacó Priscila Rojas, gerente de Idiomas de Kumon México.

Dijo que sólo tres de cada siete egresados manejan o entienden el inglés en nivel intermedio o avanzado, para el 70% restante esa limitante va en contra de sus aspiraciones de conseguir un buen empleo

Además, los egresados con esa carencia ven disminuidas sus posibilidades de ser contratados en países europeos o Estados Unidos.

Ante esto Kumon fortalecerá su cobertura de enseñanza a sus mas de 450 centros en todo el país, donde el 80% de ellos ya cuentan con el Método para idiomas, que le ha ganado a la empresa reconocimiento internacional.

“El objetivo es que el 100% de las franquicias ofrezcan inglés y asi apoyar a más alumnos en dominar un segundo idioma”, dijo la catedrática y reconocida especialista en idiomas.

Se calcula que hay más de mil empresas estadunidenses en México y Centroamérica, desde grandes transnacionales hasta startups que ya tiene oficinas o un ámbito comercial en la región, y debido a su naturaleza, el hablar un segundo idioma es un requisito determinante para contratar a estudiantes o egresados.

Priscila Rojas, especialista y tambien gerente de Idiomas de Kumon para Centroamérica y el Caribe, destacó que el 70% de las universidades piden para titularse que el egresado tenga un dominio de nivel B1, que es intermedio en el dominio del inglés.

Esto es insuficiente pues en dicho nivel B1, los estudiantes cumplen las competencias básicas, pero todavía no son capaces de trabajar o estudiar exclusivamente en inglés, de acuerdo con la empresa EF Set que aplica pruebas de conocimiento de una segunda lengua.

“Hablar un segundo idioma aumenta en 40% las posibilidades de conseguir un buen empleo”, señaló.

Sin embargo, “sólo alrededor del 30% de los egresados dominan el idioma inglés; ese es un porcentaje bajo y atribuye a que menos del 50% de las universidades ponen como una materia obligatoria o requisito para titularse el tener inglés, y, el 70% de ellas, sólo exigen al alumno que tenga un nivel de dominio B1 o B2, es decir intermedio para su titulación”.

De acuerdo con pruebas de diagnóstico de la japonesa Kumon sólo el 30% de los estudiantes latinoamericanos con licenciatura hablan inglés, mientras que a nivel bachillerato o preparatoria sólo es el 14%, y disminuye a 3% en nivel secundaria, lo que pone en desventaja competitiva a los candidatos de la región para obtener empleos mejor remunerados.